jueves, 3 de septiembre de 2015

El principio.

  Creo que mi historia comienza el día que me dicen que mi madre tiene Alzheimer. Creo que ahí me cambio la vida para siempre.  Yo ya estaba casada y muy feliz. Todavía no tenia a mis hijas. Pensé.... pero mi madre ?  Mi madre? ? ?
Eso no se cura !!

          Fue un camino muy difícil para mí . Tuve que aceptar muchas cosas que no quería y por supuesto no lo pude hacer sin ayuda. Estuve un tiempo yendo al psicólogo,  toda la ansiedad de mis sentimientos afectaba a mi cuerpo y no podía manejar mis emociones pero poco a poco lo fui logrando.
           
          Tuve que aprender a ser fuerte, a distanciarme  de mi familia en algunos momentos para ser yo y ser fuerte . Y así poco a poco empecé a aprender a ser feliz de nuevo.

            Amo a mi madre, la adoro pero ya no está.  Me duele...... y no me duele ya. Sólo quiero que no sufra.

             En ese momento, hace años al principio de la enfermedad, la quise hacer abuela. Y así fue.  Nació mi primera hija, creo que era un regalo para ella y para mi. Y Dios sabe lo bien que lo pasamos durante esos primeros años  y de las locuras que era estar con mi primera hija y mi madre a la vez.

           Tuve que aprender a ser madre e  "hija cuidadora" al mismo tiempo y reconozco que fue una locura. Pero que bonito todo lo que aprendí! !!
 Eso lo pienso ahora claro !!jeje
               Aprendí de verdad los valores importantes de la vida. Aprendí a poner cada sentimiento en su lugar. Aprendí lo que de verdad importa en esta vida. Vivir y ser feliz junto a los tuyos. Lo demás va y viene, el dinero, el trabajo....lo importante es vivir.
         
            Y pasaron los años, 4 años,  y tuve a mi angelito particular,  nació mi segunda hija, una niña que me ha dado una de las lecciones más importantes de mi vida.
         Qué duro es pensar que puedes perder un hijo. Esta niña me ha removido tanto.....y el amor que siento por mis hijas no soy capaz de describirlo con palabras.  Ya no existe el egoismo en mí. Pero todo lo que pasamos con ella es otra historia. Gracias a Dios está sana y eso ya es mucho.

          Entonces con todo lo que tenía en aquella epoca, cada noche me acostaba dando gracias por todo . Y cuando todo estaba bien pues  llega la noticia. El cáncer .
Podría haber sentido rabia y preguntarme por qué a mí,  pero no.
Siempre pienso que todo puede ser mucho peor. Y el cáncer se puede curar. El alzheimer no. Así,  que  yo creo que tengo suerte.
Si no hubiera tenido una inflamación  en la axila no me hubiera dado cuenta que tenía un bulto y si no me hubiera encontrado con mi "doctor House"  no me hubieran operado y no hubiera sabido que ese bulto era cáncer. Y a lo mejor no podía escribir estas palabras .
       
         Así que sí,  tengo suerte y sólo puedo dar gracias por estar viva. Vivo el momento. Mañana ya veremos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario